Cuando se busca equilibrio en cada aspecto de la vida, tener un espacio para el ¨deporte¨ es fundamental, no solo por que es vida sino, porque cuando realizamos alguna actividad física, se activan en nuestro cuerpo la DOPAMINA, que es aquella hormona que desencadena una sensación de euforia, logro y satisfacción tras la práctica del ejercicio, de esta manera conectamos con nuestro ser y por ende nos sentimos mejor. Pero, además se activa la SEROTONINA que es un neurotransmisor que afecta el estado de ánimo e induce a una sensación de calma. Esta se produce finalmente con el cierro del ciclo de ejercicio.
Como podemos leer, son varias acciones de beneficio para nuestro cuerpo y mente que se liberan con la práctica del ejercicio. Ahora bien, no tienen que ser largas jornadas de entrenamiento, quizá 15 minutos y hasta 1:30 dependiendo de nuestro manejo del tiempo, son suficientes. El ¨secreto¨ esta en ser constante y disciplinados.